En primavera nuestra casa crece y se despliega al exterior. Terrazas y jardines cobran protagonismo, se visten de color y nos invitan a disfrutar al aire libre.
¿Te encantan las alfombras y no quieres renunciar a ellas en verano? No lo hagas. Busca alfombras de fibra vegetal como la ortiga y el yute o de origen animal como la seda y la lana para poder pisar descalza tu salón, dormitorio …
Ente mis favoritas están los kilims. Y en cuanto a las de fibras naturales, tipo sisal, yute o cáñamo no te dejes influenciar por su aspecto rústico, precisamente quedan genial contrastándolas con mobiliario moderno. Son las alfombras más neutras y combinables ¡Nunca pasan de moda!
Alfombras Kilims, para todos los gustos.
Su colorido y figuras geométricas aportan ese rollo boho a la casa que tanto nos hechiza, y es que últimamente todo lo oriental y exótico arrasa. Es una alfombra anudada de gran tradición en paises de oriente como Irán, Turquía o Pakistán. Al no tener pelo, son más ligeras y económicas que las alfombras de lana. Cuando además se hacen con hilo de algodón quedan muy veraniegas en los suelos frescos de las casas de vacaciones.
¡Atrévete a llenar de color tu salón, dormitorio o tu aburrido pasillo!
Alfombras de yute o esparto.
Son un recurso socorrido, y existen nuevas versiones tintadas y estampados que te van a encantar. Tanto si buscas tonos neutros como colores más atrevidos, el yute ofrece posibilidades económicas que vestirán
rápidamente un espacio. Tanto las de yute como las de sisal se parecen mucho y comparten ciertas características: larga duración, limpieza fácil, sirven para todas las épocas del año y son económicas.
Sin embargo, también existen diferencias entre ambas. El yute es más blando que el sisal además de biodegradables. Las de sisal suelen ser de color más claro que las de yute pero también más resistentes. Asimismo, son especialmente recomendadas para alérgicos al polvo y absorben el ruido.
Alfombras en verano de algodón y arpillera
El significado de arpillera hace referencia a la pieza de tejido que es gruesa y áspera. El color natural de este tejido es blanco-amarillento, amarillo o castaño, pero es fácil de teñir o pintar.
Las alfombras de algodón son productos versátiles y aptos para todo tipo de espacios. El algodón es un material de origen vegetal y muy respetuoso con la piel, lo que hace a las alfombras de algodón el lugar de
juegos perfecto para los pequeños de la casa. Para proteger a los niños del frío del suelo y evitar que se hagan daño jugando.
Alfombras antibacterianas para el verano
Repelan al polvo y que regulan la humedad como el modelo KUANTO de la marca española de alfombras KP que además de ser ecológico está hechos con fibra extraída del bambú mezclada con poliamida reciclada.
Ahora bien, ¿cómo limpiamos este tipo de alfombras? Y aquí es donde entramos nosotros! Además de ofreceros algunos consejillos para llevar el mantenimiento de tus alfombras en verano, también os ofrecemos nuestro servicio especial de limpiezas de alfombras. No dudes en confiar en profesionales para la limpieza de tu hogar.
Aquí vienen los consejos!
¿Cómo limpiar alfombras de fibra natural? 6 trucos para limpiar.
Las alfombras de yute, cáñamo o sisal son frescas, bonitas y fáciles de combinar, pero la manera de limpiarlas puede plantear dudas. Te las resolvemos todas.
Para realizar una limpieza diaria de mantenimiento de la alfombra, lo mejor es utilizar el aspirador provisto de un cepillo de cerdas giratorio mecánico. EL cepillo no debe ser demasiado duro y no debe profundizar
demasiado en la alfombra. De esta manera, se puede eliminar aproximadamente el 90% de la suciedad.
Pero, ¿qué pasa si nos encontramos con manchas más especiales, más profundas?
- Actúa cuanto antes. Cuando se derrame un líquido, lo ideal es actuar cuanto antes. Pon un paño o un papel sobre la mancha para que absorba gran parte del líquido antes de que lo haga la alfombra. Y no frotes, solo conseguirás extender la mancha y la humedad.
- Seca la humedad. Utiliza el secador (sí, el de pelo) hasta que la humedad del interior de las fibras desaparezca.
- Limpieza de manchas específicas. Si la alfombra de fibras tiene algún ‘lamparón’, utiliza un cepillo de cerdas suaves con una solución de agua y sal muy concentrada. Frota la mancha de fuera hacia dentro. Repite la operación por el otro lado de la alfombra.
- Controla la humedad. Friega también el suelo en el que va colocado la alfombra y espera a que se seque para volver a ponerla en su sitio. La humedad es la gran enemiga de este material y podría provocar la aparición de moho.
- Utiliza agua con jabón. Para una limpieza más intensa, pasa por toda la alfombra un paño húmedo (muy bien escurrido, súper importante) con jabón neutro. Ciertos productos químicos son abrasivos con las fibras naturales y su aplicación puede estropearlas.
- Elimina los olores. Espolvorea bicarbonato por toda tu alfombra de fibras, deja que actúe durante 15 minutos y después aspira. El bicarbonato es un desodorizante natural que te ayudará a eliminar los malos olores.
Recomendaciones importantes para el mantenimiento y limpieza de alfombras de fibra natural.
- Las alfombras de fibras naturales necesitan una humedad en el ambiente de al menos un 45%. Si el aire es demasiado seco, la alfombra corre riesgo de envejecer más rápidamente.
- No poner nunca plantas, ni siquiera con un plato o soporte, directamente sobre la alfombra. La humedad de la condensación provoca daños irreparables en la superficie de la alfombra.
- En caso de que la alfombra esté muy sucia, haga limpiar la alfombra regularmente por un profesional. Alargará la vida de su producto.
Así que ya sabes. Limpia y guarda tu alfombra de invierno y saca las alfombras en verano para transformar el estilo de tu hogar.